TE ACOMPAÑO A REORGANIZAR TU INTERIOR A TRAVÉS DE TU CUERPO
Nuestras grandes heridas emocionales y traumas, las hemos experimentado en relación con otra(s) personas(s) y por eso, se han de sanar en relación. Yo te ofrezco crear una relación terapéutica para afrontar las consecuencias de tus experiencias negativas y traumáticas. Aquí podrás encontrar un espacio de sostén y de confianza -individual y grupal-, donde aprender herramientas y recursos para tu proceso personal. Donde iremos creando una sensación de seguridad tanto en la relación terapéutica como contigo. Y si eres una persona profesional de la salud mental y emocional, también podrás encontrar nuevas maneras de acompañar en terapia con un enfoque amable y compasivo.
Al vivir en una sociedad con muchas carencias de Amor, de buen trato, de respeto y de cuidados, significativos para el desarrollo de nuestro bienestar, donde el sistema patriarcal y capitalista se nutre de nuestros traumas y nos lleva a anestesiarnos a través de la comida, las redes sociales, las plataformas de contenido audiovisual, las compras compulsivas, los encuentros sexuales “sin amor”, las drogas, la productividad laboral… Se hace evidente la necesidad de personas con un enfoque integrativo. Teniendo a la vista todos los factores que atraviesan a cada ser. Los procesos personales necesitan de personas creadoras de espacios transformadores dónde, en vez de anestesiarte, ofrecemos la posibilidad de conectar con tu verdadera Esencia. Una maravillosa oportunidad para redescubrir o resaltar tus capacidades y habilidades. Dando pie a disfrutar de ti contigo, de tus relaciones -de amistad, familiares, de pareja…-, de tu sexualidad, de tu cuerpo y de todo lo que te rodea.
Mi misión es aprender a estar conmigo en plena y constante escucha, habitando mi verdad. Proceso que no deja indiferente mi camino profesional. El cual es, acompañarte a llevarte bien contigo y en contextos grupales. Facilitando aquello que pueda liberar o aliviar tu dolor y sufrimiento. Además de conectar con el Amor de Ser y la alegría de vivir. ¿Fácil? No, no te voy a mentir. En este camino de sanar-te, habrá momentos complicados y desagradables. Sin embargo, transitar el dolor aunque a veces no sea cómodo, es hermosamente liberador. Y una vez traspasado, conectarás con ligereza y mucha más apertura a la alegría, al placer, al gozo y al disfrute.
¿Quieres que te acompañe en tu proceso personal? ¿Te dedicas a la psicología u otras maneras de acompañar y necesitas supervisión? Contáctame.